Indice de contenidos
- 1 Qué es el Salmorejo Cordobés – Origen, Características y Tradición
- 2 Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
- 3 ⏱️ Tiempos de Preparación
- 4 Ingredientes para Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico (4 personas)
- 5 Preparación paso a paso del Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
- 6 Información Nutricional (por ración aprox.)
- 7 Consejos para el Salmorejo Cordobes con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
- 8 Preguntas Frecuentes sobre el Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
- 9 Emplatado y Presentación del Salmorejo
- 10 Acompañamientos y Maridaje
Qué es el Salmorejo Cordobés – Origen, Características y Tradición
El Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico es una sopa fría originaria de la región de Córdoba, Andalucía, que ha ganado reconocimiento no solo a nivel nacional sino también internacional. Este plato, que se caracteriza por su espesor y textura cremosa, se diferencia notablemente de otras sopas frías como el gazpacho, que tiende a ser más líquida. La base del salmorejo lo constituyen ingredientes frescos y de alta calidad, entre los que destacan el tomate maduro, el pan, el ajo, el aceite de oliva virgen extra y el vinagre.
Históricamente, el salmorejo se remonta a la época de los romanos, cuando se elaboraban sopas frías mezcla de pan y vegetales. Sin embargo, a lo largo de los años, se ha ido refinando y adaptando, convirtiéndose en un emblema de la cocina sevillana y cordobesa a parte del gazpacho Andaluz. Particularmente, es en Córdoba donde se ha perfeccionado esta receta, dándole su forma más reconocible. El salmorejo cordobés se puede encontrar en muchas bodegas y restaurantes, destacando por su riqueza y sabor.
El carácter distintivo de esta preparación se ve acentuado por su textura suave y cremosa, lo que permite que se sirva frecuentemente acompañado de lascas de huevo duro y jamón ibérico, elevando su sabor y presentación. Además, la elección de ingredientes frescos y de alta calidad es crucial en la propia elaboración del salmorejo. Los tomates, por ejemplo, deben ser de la mejor calidad y madurez, lo cual es determinante para obtener el sabor óptimo. De hecho, los mejores salmorejos se elaboran en el verano, cuando estas hortalizas están en su mejor momento.
Curiosamente, el salmorejo ha ido ganando popularidad en todo el mundo, no solo por su sabor, sino también por ser un plato saludable y refrescante, ideal para los meses más calurosos. Su éxito radica en la simplicidad de sus ingredientes combinados en una deliciosa mezcla que representa la esencia de la gastronomía andaluza.
Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
Este salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico es una receta tradicional andaluza que refresca y llena de sabor. La mezcla de la cremosidad del salmorejo con el toque salado del jamón y la suavidad del huevo lo hacen un plato irresistible.
⏱️ Tiempos de Preparación
| Etapa | Tiempo |
|---|---|
| Preparación | 15 minutos |
| Reposo | 1 hora |
| Total | 1 hora 15 minutos |
Ingredientes para Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico (4 personas)
- 1 kg de tomates maduros
- 200 g de pan del día anterior
- 1 diente de ajo pequeño
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- 2 huevos duros (para las lascas)
- 80 g de jamón ibérico en lascas
Preparación paso a paso del Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
1. Preparar los tomates
Para preparar el salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico, comienza lavando y pelando los tomates maduros. Tritúralos hasta obtener un puré suave.
2. Añadir el pan
Incorpora el pan del día anterior cortado en trozos al puré de tomate. Deja que se empape unos minutos para que el pan se ablande y luego vuelve a triturar para integrar bien.
3. Incorporar ajo y sal
Añade el diente de ajo sin germen y una pizca de sal al salmorejo. Tritura de nuevo para que se mezclen los sabores.
4. Emulsionar con aceite
Con la batidora en marcha, añade poco a poco el aceite de oliva virgen extra hasta conseguir una crema homogénea y untuosa. Así el salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico tendrá la textura ideal.
5. Enfriar y servir
Deja reposar el salmorejo en la nevera al menos una hora para que esté bien frío. Sirve en cuencos y decora con las lascas de huevo duro y el jamón ibérico por encima.
Información Nutricional (por ración aprox.)
| Nutriente | Cantidad |
|---|---|
| Calorías | 320 kcal |
| Proteínas | 12 g |
| Grasas | 22 g |
| Carbohidratos | 15 g |
Consejos para el Salmorejo Cordobes con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
- Utiliza tomates muy maduros para potenciar el sabor del salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico.
- El pan debe ser del día anterior para que absorba bien y aporte textura.
- Controla la cantidad de ajo para no sobrecargar el sabor.
Preguntas Frecuentes sobre el Salmorejo Cordobés con Lascas de Huevo y Jamón Ibérico
¿Puedo usar otro tipo de pan?
Para el salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico, es mejor usar pan con miga densa y sin corteza para conseguir la textura cremosa característica.
¿Es necesario pelar los tomates?
Pelar los tomates evita que la textura del salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico sea granulada, aunque si te gusta con piel puedes omitir este paso.
¿Se puede conservar el salmorejo?
Guarda el salmorejo cordobés con lascas de huevo y jamón ibérico en la nevera en un recipiente hermético y consúmelo en 2-3 días para mantener su frescura.
¿Puedo añadir otros ingredientes para decorar?
Claro, además de lascas de huevo y jamón ibérico, puedes añadir atún, aceitunas o incluso un chorrito extra de aceite de oliva.
Emplatado y Presentación del Salmorejo
La presentación del salmorejo cordobés es un aspecto fundamental que puede elevar la experiencia de este plato tradicional. Servido en un tazón o en platos hondos, el salmorejo debe ser un deleite tanto para el paladar como para la vista. La forma más común de presentación incluye lascas de huevo duro y jamón ibérico, ingredientes que no solo realzan el sabor del salmorejo, sino que también aportan un atractivo visual significativo. El brillo del jamón ibérico, junto con las amarillas y cremosas lascas de huevo, crean un contraste que invita a degustar este plato.
Para lograr una presentación impresionante, se sugiere colocar el salmorejo en el centro del plato, permitiendo que los ingredientes adicionales resalten en la superficie. Las lascas de huevo se pueden dispersar artísticamente por encima y se recomienda que el jamón ibérico se coloque en forma de filamentos delicados, para dar una sensación de ligereza. Un chorrito de aceite de oliva virgen extra no solo mejora el sabor, sino que añade un toque de brillo al plato, dándole una apariencia bien cuidada y apetitosa.
Además, puedes considerar añadir hierbas frescas como el perejil o el cebollino, o incluso algunos trozos de aguacate para un toque de color y frescura. Estos elementos no son solo decorativos; su sabor complementa maravillosamente el salmorejo, creando un equilibrio excepcional.
En cuanto a las opciones de acompañamiento, el salmorejo puede servirse con tostadas de pan, que permiten a los comensales disfrutar de una experiencia más interactiva al untar el salmorejo. También se pueden incluir aceitunas o frutos secos, que aportan un contraste de texturas y sabores, realzando la experiencia culinaria de este delicioso plato cordobés.
Acompañamientos y Maridaje
El salmorejo cordobés es un plato lleno de sabor que se puede disfrutar con una variedad de acompañamientos que complementan su riqueza y frescura. Uno de los acompañamientos más tradicionales son las lascas de huevo duro y jamón ibérico, que no solo añaden textura, sino también un sabor umami que realza el plato. Sin embargo, existen otros elementos que pueden servir para acompañar de manera ideal este plato andaluz.
El tipo de pan es esencial para acompañar un buen salmorejo. Se recomienda un pan blanco crujiente, como el pan de pueblo o la baguette, para facilitar el remojado en la salsa espesa. Este pan no solo absorbe el salmorejo, sino que también añade un contraste agradable en la boca. Adicionalmente, el pan de hogaza, con su corteza dorada, complementa la experiencia culinaria gracias a su sabor robusto.
Además de las lascas de huevo y jamón, se pueden considerar otras tapas andaluzas para acompañar el salmorejo. Una opción popular es el queso de cabra con miel, que aporta un equilibrio entre lo salado y lo dulce. Las aceitunas aliñadas y los pimientos asados son otras excelentes elecciones que añaden un sabor mediterráneo a la mesa. Estas tapas no solo crean un festín visual, sino que también enriquecen el conjunto de sabores que se pueden disfrutar en un almuerzo o cena.
El maridaje de bebidas es otro aspecto importante a considerar. Los vinos locales, como el vino tinto de Montilla-Moriles o un vino blanco fresco y afrutado, se complementan perfectamente con el salmorejo y sus acompañamientos. Para aquellos que prefieren las cervezas, las cervezas artesanales andaluzas ofrecen una opción refrescante que equilibra la cremosidad del salmorejo. Las opciones de maridaje pueden adaptarse según las preferencias personales y las ocasiones, creando una experiencia gastronómica única y memorable.
